Era un día como cualquier otro cuando Gek y Pak tuvieron su primer encuentro fatídico con Belzeebú, la cabra demoníaca. Según cuentan las leyendas, el diablo suele tomar la forma de una cabra, y luego de observar a los ojos a esta aterradora criatura, no nos quedan dudas de que es cierto.
Tal como Pak cuenta en su terrorífico testimonio, en una ocasión la cabra comenzó a hablar en un idioma extraño y a sacar la lengua. Días más tarde se la vio mostrando los dientes en una sonrisa maquiavélica a su aterrorizada audiencia.
En cuanto a sus desgraciadas co
mpañeras de jaula, Beelzebú tiene la mala costumbre de pelearles, pegarles con su cornamenta, gruñirles y arrebatarle a las cabritas los tallitos que los niños les dan para comer a través de la jaula.
La última vez que fuimos al parque la encontramos en una jaula aislada, probablemente porque tuvieron que sacarla de la jaula de las cabras por intentar poseer a las demás... diabólicamente.
Si lo visitan les recomendamos que no lo mires a los ojos, ya su energía oscura puede poseerlos. Tampoco intenten alimentarlo si no quieren perder su preciada mano. Y sobre todo
no vayan a verlo de noche, porque es a la luz de la luna cuando encarna en su verdadera forma y se enciende en llamas del infierno color carmesí, absorbiendo la energía de las almas perdidas que intentan escapar hacia la luz. O al menos eso dice Vago.
Nadie sabe la verdad acerca de este animal, puede que solo se trate de una desgraciada cabra que se ha vuelto loca por el cautiverio y que todo lo que busca es un poco de amor. Pero preferimos rechazar esa teoría absurda.
En fin, este es solo uno de los extraños sucesos paranormales que ocurren en el parque independencia, no sabemos si por la mala alimentación que se le suministra a los animales o por una intervención del mismo Mefistófeles. Optamos por lo segundo, a pesar de que los medios dicen lo contrario.
Los dejamos con un video en donde se muestra la actividad de la cabra luego de ingerir calmantes. O sea que no la verán hacer nada sobrenatural. Somos piadosos, no queremos que esta noche no duerman.
Hasta la próxima nota.
Gek y Pak.
Tal como Pak cuenta en su terrorífico testimonio, en una ocasión la cabra comenzó a hablar en un idioma extraño y a sacar la lengua. Días más tarde se la vio mostrando los dientes en una sonrisa maquiavélica a su aterrorizada audiencia.
En cuanto a sus desgraciadas co
mpañeras de jaula, Beelzebú tiene la mala costumbre de pelearles, pegarles con su cornamenta, gruñirles y arrebatarle a las cabritas los tallitos que los niños les dan para comer a través de la jaula.La última vez que fuimos al parque la encontramos en una jaula aislada, probablemente porque tuvieron que sacarla de la jaula de las cabras por intentar poseer a las demás... diabólicamente.
Si lo visitan les recomendamos que no lo mires a los ojos, ya su energía oscura puede poseerlos. Tampoco intenten alimentarlo si no quieren perder su preciada mano. Y sobre todo
no vayan a verlo de noche, porque es a la luz de la luna cuando encarna en su verdadera forma y se enciende en llamas del infierno color carmesí, absorbiendo la energía de las almas perdidas que intentan escapar hacia la luz. O al menos eso dice Vago.Nadie sabe la verdad acerca de este animal, puede que solo se trate de una desgraciada cabra que se ha vuelto loca por el cautiverio y que todo lo que busca es un poco de amor. Pero preferimos rechazar esa teoría absurda.
En fin, este es solo uno de los extraños sucesos paranormales que ocurren en el parque independencia, no sabemos si por la mala alimentación que se le suministra a los animales o por una intervención del mismo Mefistófeles. Optamos por lo segundo, a pesar de que los medios dicen lo contrario.
Los dejamos con un video en donde se muestra la actividad de la cabra luego de ingerir calmantes. O sea que no la verán hacer nada sobrenatural. Somos piadosos, no queremos que esta noche no duerman.
Hasta la próxima nota.
Gek y Pak.
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